Es patético observar como en el proceso de acoso; sea escolar, laboral, organizativo o institucional una de las armas de que se nutren los cobardes colaboradores para desestabilizar emocional y psicológicamente a las víctimas es la estrategia del descrédito para a través de rumores y bulos, aislar y doblegar a las víctimas. Este sistemático proceso de desvinculación social y grupal para la inestabilidad anímico-emocional, sistemático y sibilino hacia la víctima es realizado no sólo por quien dominante, aunque muchas veces en segundo plano, y muchas veces con una marcada psicopatología mueve los resortes para esa marginación y doblegamiento del chivo expiatorio. A él se le unen un grupo de colaboradores que apoyan la dominación y minante desprestigio, aupando y acrecentando dichas situaciones. Otro grupo más pasivo, pero también cómplice y complaciente es aquel que silencioso e intentando mirar hacia otro lado, da el visto bueno con ese cobarde silencio y el pensar que a ellos no les ha tocado, incluyendo la sensación de que por el momento no se sienten amenazados. La construcción grupal de todo este entramado con la colaboración activa y pasiva dará como lugar a la desadaptación de la víctima al grupo, incluido el hecho de sentirse culpable, por la inseguridad de este minante y sistemático aislamiento, desprecio, vejaciones, rumores, bulos, discriminación negativa consentida, inseguridad, falta de autoestima, etc. lo que propiciará en la víctima secuelas irreparables como el stress postraumático.
Parece contradictorio pero elementos muy típicos en estos grupos de asedio y acoso y derribo hacia las víctimas, son los de aquellos personajes que, sintiéndose inseguros y faltos de la suficiente personalidad intentan voluntariamente conquistar un status quo hacia el líder dominador; no sólo apoyando su dominio bruto sino incluso realizando “tareas extras” que fortifiquen y den mayor valía al líder. Es el fenómeno de lo que vulgarmente se conoce como”trepa” o pelota de turno”, típico sujeto que meneando la “colita” ante el jefe del acoso, manifiesta con su actitud una total colaboración y disposición hacia las ejecuciones y proyecciones del acoso por parte del dominador principal, sencillamente porque son individuos con un enorme déficit de asertividad y, sobre todo, inseguros de si mismos.
Los siguientes vídeos sin duda alguna, nos describen las situaciones típicas en cualquier tipo de acoso, incluido el de organizaciones de cualquier tipo y que curiosamente, surgen como respuestas a miedos, temores y sensación de peligro y/o amenaza .
Dedicado a todos aquellos sujetos, que de un modo u otro han dado lugar a la situación que venimos padeciendo en familia desde hace demasiado tiempo, incluyendo a ciertos minusvalidistas pensantes de ciertos grupos , que con sus hostiles discrepancias y faltos del rigor mínimo ni siquiera entienden que en muchas ocasiones están haciendo un papel tan sucio como del que se quejan tan a menudo por otras instituciones u organizaciones., de las que se sienten víctimas, pero que en no raras ocasiones son meros aprendices cual soldaditos del extinto servicio militar, al quejarse de las “novatadas” y recordar derechos para luego tras su status temporal, erigirse en verdaderos “abuelos” de las “putadas”.
Fuente vídeo 1:
YouTube - 5.mobbing LA ACUSACION FALSA EN EL ACOSO.
Fuente vídeo 2:
YouTube - 7. Mobbing El mecanismo del chivo expiatorio
Fuente:
http://vagabundotraslalibertad.blogspot.com/2010/07/sobre-rumorologias-cuando-lo-importante.html
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