La presente bitácora, pretende recoger noticias, documentos, casos reales y toda aquella información conducente a formar, informar, denunciar y a paliar los efectos devastadores de este terrorismo socio-escolar.
Acoso escolar e institucional (Pincha en la imagen)
ACOSO ESCOLAR E INSTITUCIONAL (Pincha en la imagen)
A menudo, saltan a los medios de comunicación noticias referentes a agresiones
de individuos en colegios (normalmente estadounidenses) de estudiantes o
ex-alumnos de los propios colegios, donde sólo suele reflejarse el deterioro
mental del agresor, sin ofrecer más pistas que ese estado de posible “locura
transitoria”. Si se hurga en la noticia en sí, a menudo se comprueba que estos
agresores han sido víctimas del terrorismo socio-educativo del bullying o acoso
escolar, donde desgraciadamente nadie en su momento tomó cartas en el asunto y
donde estos agresores tienen como antecedente el haber sido acosados
sistemáticamente.
Por supuesto, nada de esta información suele aparecer, pues las
responsabilidades primeras de estos actos terroristas serían de los propios
colegios, cómplices finalmente de estos actos cobardes, que con el silencio
cómplice están proporcionando el caldo de cultivo para que el deterioro
cognitivo a través de frecuentes cuadros de estrés postraumático de la víctima,
ahora convertida en verdugo, junto con el ninguneo, desidia y ocultamiento de
estos sucesos de lugar a una situación límite, donde finalmente impera la ira
de esa agresividad latente que se ha ido almacenando con el tiempo y la
marginación de la víctima, pasando en estos radicales casos de ser el hostigado
a depredador aniquilante.
Lejos de justificar tal acto despiadado, me queda pensar que el abandono y
desidia de todo un sistema educativo, sanitario y social hacia las víctimas de
esta lacra socio-educativa finalmente ayudaron a esta víctima a convertirse en radical verdugo implacable, agarrar unas
armas e intentar usarlas contra terceros posibles enemigos, sólo que muchos terceros con su silencio y ninguneo puedan ser cómplices cobardes de
estos gravísimos sucesos que jamás debieron producirse…
Al respecto, leía ayer un post de Facebook, donde se hacía referencia
a esa falta de estudio y reflexión sobre el caso del chaval que ha acuchillado
a varias personas de un instituto:
“La violencia JAMÁS se justifica
Había que preguntar e investigar que le
ha llevado a este menor a hacer semejante barbaridad.”
La violencia desgraciadamente es producto de la semilla y anamnesis social
ligada a vivencias de individuos y sociedades. La violencia no debería
justificarse si la ética, decencia y compromisos solidarios fueran efectivas,
pero me temo que a menudo estas premisas se echan en falta.
Definir un hecho tan lamentable como el sucedido por diversos medios estos días y
calificados por intereses oscurantistas que un individuo se ha vuelto loco,
agresivo, es psiquiátricamente inestable, sufre una incapacidad mental, es peligroso
etc. es inconsecuente y muy superficial, tanto que a menudo se utiliza para
disfrazar el contexto, situaciones y modos vivendis que tan a menudo sucede en
los centros escolares y en la sociedad actual misma: ocultamiento y silencio
cómplice sistematizado, apoyado por los supuestos garantes institucionales y
acompañado en exceso por el populismo que una sociedad amodorrada cual rebaño
de ovejas sigue a ciertos pastores institucionales.
La violencia no debe justificarse. Sin embargo, tampoco deben
justificarse en modo alguno, graves hechos aduciendo con socorridos
calificativos a quien los infringió. Digamos que hay que indagar más allá de la
zona superficial. Hay que desmontar todas las capas hasta llegar al núcleo
principal. No se trata de quitar la primera cáscara de la cebolla o descubrir la
primera de las varias muñecas rusas, matrioska, sino llegar a la capa final, a
la última muñeca.
La violencia JAMÁS debería justificarse, siempre que el compromiso y
búsqueda del respeto y protección fueran reales y efectivas, lejos del
ninguneo, oscurantismo y del síndrome de negación que, en demasiados casos, se
verifican. Lamentablemente la VIOLENCIA GRUPAL
OCULTA, DISFRAZADA, SILENCIOSA, CÓMPLICE y COBARDE, repetida por distintas
vías, GENERA finalmente VIOLENCIA individual, extrema y radical,
que obviamente se rechaza, pero que en demasiados casos es pura consecuencia de
las situaciones sufridas anteriormente y ninguneadas por un amplio colectivo de
espectadores pasivos y por quienes directamente infringieron mucho daño a, en
este caso, el agresor. Agresor hoy. Mañana
quizás víctima empujada a un suicidio inducido. Ambas suelen interesar y dar
mucho juego a una amplia mayoría de medios de comunicación. Muy pocos se
interesarán por buscar y conocer la anamnesis socioescolar y sus secuelas
perdurables ya de por vida. Quizás ninguno llegará a descubrir, estudiar e
investigar a la última muñeca matrioska.
Demasiados culpables andan sueltos. Demasiada sociedad amodorrada y conducida por vicios institucionales enquistados en el ostracismo y mirar a otro lado, que, en general, es abducida y convertida en mera y vulgar espectadora pasiva. Demasiadas instituciones se desentienden y miran a otro lado; algunas incluso intoxican y disfrazan la dura realidad del día a día de tantas y tantas presas, apoyando y empoderando incluso a depredadores; verdaderos alumnos aventajados de futuras psicopatologías. Demasiados jueces y fiscales caen en la inacción por falta de compromisos/formación y/o desidia. Demasiados cómplices activos o pasivos, en definitiva que permiten que muchas víctimas finalmente sólo encuentren el túnel del suicidio, como último camino. Muerte inducida por demasiados terceros que nada hicieron a favor de quienes sufren ese calvario terrorista. ¡Asco da!
-Sólo 1 de cada 5 niños reconoce haber sufrido
acoso escolar; es decir el 80 % de víctimas y, por tanto casos, son
ninguneados.
-De ese 20% de casos, “teóricamente” tenidos
en consideración por el estamento educativo, apenas un 5% finalmente son
estudiados y llegan a los juzgados con ciertos visos de “justicia”.
-El propio poder judicial, con fiscalía a la cabeza, sistemáticamente
ignorante funcional de este cáncer socio-educativo, archiva multitud de casos.
Lo mismo sucede con el mobbing y relacionados.
-Apenas un 1% de casos de maltrato
infanto-juvenil en el entorno escolar, salen adelante y son perseguidos por la
denominada Justicia. En esos excepcionales casos favorables a la víctima, la condena
apenas da para terapias psicológicas, que desgraciadamente somatizan y afectan de por vida en la actitud, autoestima, personalidad social, individual,
laboral, salud mental y un largo etcétera de los afectados; y por ende, de su
entorno familiar más próximo, que son penalizados, vilipendiados, acosados y
derribados por bulos y rumorologías sibilinas por el noble hecho de verse
obligados a denunciar al entramado educativo y sus múltiples peones implicados por acción u omisión.
-En definitiva, en este país involucionista de
boina y pandereta, el 99 % de víctimas (hablamos de población infanto-juvenil)
son ninguneadas, maltratadas, excluidas, marginadas, marcadas de por vida y
serias candidatas a engordar la enorme lista de pacientes que serán enviados a
salud mental, donde por cierto, poca ayuda tendrán, dado el lamentable estado
de desarrollo psicoterapeútico de una especialidad: psiquiatría infanto-juvenil
que, a fecha de hoy no existe en la práctica, ya que España es uno de los
poquísimos países de Europa que aún no tiene reconocida dicha especialidad
médica, por mucho letrero que nos publiciten en las consultas.
99% de casos ocultados, disfrazados y negados, con la complicidad y alevosía de demasiados actores institucionales y sociales que por inacción, dejadez y/o cobardía permiten que de cada 99 víctimas de 100, éstas sean invisibilizadas, excluidas, señaladas. marcadas y obligadas a visitar probablemente de por vida consultas de psicología y/o psiquiatría, apenas especializadas en estos temas y con menos recursos si cabe aun.
Víctimas que serán tildadas de por vida de inadaptadas, antisociales, sin relaciones sociales, inestables y en definitiva, enfermos mentales. Títulos marcados como se hace con el ganado porque quienes dirigen el estamento educativo, apoyados por el corporativismo y silencio cómplice de instituciones sociales y sanitarias, niegan este terrorismo en las escuelas. Lo ocultan, lo entierran, lo disfrazan, lo invisibilizan y, por tanto, no existe en la estadística.
Día contra el acoso escolar: SEGUIMOS IGUAL. nada que
celebrar ☹
Los padres
“helicóptero” causan 3 de cada 10 casos de acoso hacia el profesorado, según manifiesta
el Defensor del Profesor, a través de la Coordinadora nacional del sindicato ANPE,
Sra. Sequera
Pongámonos en
situación: por ejemplo, supongamos que tu hija/o sufre acoso escolar y pones en
conocimiento el caso a los colegios. ¡Craso
error!: el acoso escolar no existe, por ello ningunearán el tema y lo reducirán
a las repetidas frases de “son cosas de niños” y “aquí nunca ha pasado”. Haz
caso a los buenos consejos del cole. Vete contento y tranquilo para casa, ya
que en horario escolar tu quejica niño está en buenas manos.
Si ves que este supuesto minante proceso de desgaste y
hundimiento psicológico va a más y comienzas a ver a tu hija/o somatizando la
enorme angustia, depresión, falta total de autoestima e incluso estrés
postraumático,¡no pasa NADA!
Se
dice, se cuenta, que hay víctimas que llegan a suicidarse, pero eso no ocurrirá
con tu hijo. Ya te dijeron en el cole, directores e incluso inspección que no
hay nada que temer. Sólo son cosas puntuales, típicas de niños y poco más. Al
fin y al cabo, ellos están alertas y vigilantes con cada niño para que en sus
sacrosantos colegios no sucedan ni se consientan casos de bullying o acoso
escolar. Es decir, no seas “coñazo” y atiende a las amables y consecuentes
palabras de gran parte del profesorado y de quienes canalizan y dirigen sabiamente.
Ellos saben lo que hacen, siempre por supuesto, quieren y buscan lo mejor para
el alumnado que atiende. Cuidan con dedicación, respeto y cariño a tus vástagos,
eso dicen; habrá que creerlos y confiar en ellos. Es lo único que nos piden a
los padres/madres: confianza, señores. Nada más.
Si pasa el tiempo y ves
que psicológica y anímicamente tu hijo parece
derrumbarse y muestra rasgos depresivos, distimias, ataques de ansiedad,
incluso de ira por impotencia hacia lo que le ocurre, si está siempre solo,
amargado, se autolesiona, está triste, llora, no quiere ir al colegio, se pone
curiosamente enfermo los domingos por la tarde/noche, dejan de contar con el/ella,
incluso posibles amistades anteriores, bajan sus notas, pierde el apetito y su
autoestima se derrumba, se frustra a menudo e incluso agresivamente te
responde; si incluso pierde la ilusión de salir de paseo o coincidir con
posibles compañeros en determinados lugares; si sufre pesadillas, e incluso
chilla y solloza en mitad de la noche; si la escuchas que se quiere morir, si
la motivación que antes tenía por determinados asuntos se exilia de ella; si
incluso charla menos en familia y se inhibe, muestra inseguridad excesiva, no
quiere hablar del colegio, de antiguos compañeros y se vuelve introvertida, no te preocupespadre/madre.
Cuando
hables con el colegio te dirán que es la edad, o que, si tenéis problemas
intrafamiliares, si tiene celo de algún hermano e incluso si tu hijo tiene
problemas psicológicos de adaptación, etc. pero por supuesto no ligado al clima
escolar, ya que este es extraordinario sin duda alguna. Se atreverán incluso,
llegado el momento, a invitarte a que lo lleves a algún psicólogo por ellos
conocido, con una gran profesionalidad -te dirán-, curiosamente cercano a la
apología del centro, por aquello de que el propio colegio le busca una
suculenta clientela. Por supuesto, como es de bien nacidos, el agradecimiento
de este psicólogo en modo alguno empañará con sus informes y recomendaciones la
transparencia virginal de dicho centro y sus actuaciones. No lo olvidemos, en
aras de cuidar y proteger al alumno. ¡Faltaría
más!
Con todo ello, después de gastaros, padres y
madres, unas jugosas minutas para aupar la angustiosa y liliputiense autoestima
de vuestro retoño, y aunque no veáis resultados positivos,se os dirá que hay que dar tiempo al alumno, que no os
precipitéis y que sigáis creyendo en lo que esos extraordinarios profesionales
de la docencia os digan.
En modo alguno, seáis pesados ni os preocupéis por el
sobresaliente y preocupante deterioro anímico-emocional de vuestro hijo. No sea
que lo sobreprotejáis. Incluso ni caso si, alguna vez, vuestro hijo se
pronuncia por activa/pasiva o subliminarmente por “quitarse de en medio”.
Seguramente quienes te “ayudan” te dirán que son simples llamadas de atención
del niño porque quiere buscar protagonismo y ser el centro de atención, y poco
más… ¡Ellos sí que saben cómo actuar!
Si, por
el contrario, dudas de lo que te dicen y repiten esos amables profesionales y
empáticos conductores de la Educación de tus hijos cuando lo pones en su
conocimiento, sin dartecuenta
te estarás “equivocando” y quizás, quizás hagas que los problemas de tu hijo en
las aulas aumenten, ya que tu conducta errónea, proteccionista y -dicen-
exigente, podrá dar lugar a posibles “daños colaterales” hacia ti y tu vástago.
Te habrás convertido en un peligroso padre
“helicóptero” y, con ello, en un peligro manifiesto para el bien común y
ambiente escolar. El sistema educativo y todos sus asteroides institucionales
relacionados se unirán para conseguir la caída de ese molesto padre/madre
“helicóptero” y con ello la restauración para que la calma y el buen
funcionamiento del sistema escolar salga adelante. ¡Poner
en duda la credibilidad de este Sistema Educativo. Faltaría más!
Se buscarán coartadas
falsas, se denunciará falsamente a la familia, se tergiversarán contextos,
situaciones y hechos, se firmarán falsos informes, liderados por Inspección,
para intentar dar la imagen pulcra de acciones realizadas y celo hacia el
alumno-víctima y ya, chivo expiatorio.
Se orquestarán en demasiados casos
alineaciones de compañeros, profesorado y AMPAS para erradicar cualquier conato
de dejadez/inacciones/negligencias e incluso prevaricación.
Se fabricarán
campañas de descrédito, acoso y derribo hacia la víctima y sus familiares; se
propagarán bulos y rumorologías para que el “confundido”
padre/madre “HELICÓPTERO” entienda que no debe denunciar o poner en duda la
honestidad y buen hacer de todo un sistema educativo.
En definitiva,
se propagarán tóxicas y envenenadas argumentaciones para que la máxima: “Divide
y vencerás” haga su trabajo y con ello, la exclusión total de víctima y
familia, ya no sólo en el ámbito escolar, sino incluso social próximo.
Caso cerrado. Caso
desconocido, caso no existente. Habrá llegado
la paz social, la que infringieron padres/madres “helicóptero”
cuando comprueban que sus retoños van muriendo día a día. Algunos, no pocos, ya
enterrados.
Aprovecho
la ocasión para disculparme públicamente con el “Defensor del profesor” de ANPE
y Coordinadora ya que, sin ser consciente, di, parece ser, errónea y negligentemente, toda la credibilidad a mi hija en
su paso por los distintos colegios presenciales por los que deambuló; pesar
de informes de especialistas médicos, asociaciones ligadas al Defensor del
Menor, a psicóloga criminalista y un largo etc. que constataban el temible
sufrimiento padecido por ella a causa del acoso escolar sufrido y sus múltiples
heridas y somatizaciones que han hecho mella en ella, siendo ya irreparables
las secuelas, esencialmente psicológicas y sociales que arrastrará de por vida.
Disculpen Sres.por
tomar en consideración lo que, con tan sólo 10 años, esa niña le dijo a su
pediatra: “Quererse
morir por lo que estaba viviendo en su colegio”.
Disculpen
Sres. por tomar en consideracióntantas noches
de insomnio, cuando no pesadillas en muchas madrugadas, chillando en no pocas
ocasiones y contándome como determinados “maestros” y compañeros le daban de
lado o se burlaban de ella.
Disculpen
Sres. por asustarmecuando obsesiva pero inconscientemente
se hacía sangre rascándose compulsivamente el brazo.
Disculpen
Sres. cuando me entristecíaporque excluida
y discriminada, nadie contaba con ella ni era invitada a reuniones, juegos o
cumpleaños. Si acaso usada para ser motivo de burlas e increpaciones.
Disculpen
Sres. por tener en consideraciónlos dolores
de estómago que mi hija decía tener en no pocas ocasiones los domingos por la
noche o tras las vacaciones reglamentarias y llevarla al médico.
Disculpen
Sres. por el preocuparme por cosas tan nimiascomo el estrés postraumático, el cuadro
ansioso-depresivo, la gran frustración, baja autoestima, tristeza enquistada,
exclusión total con el grupo de sus iguales y demasiadas secuelas que
desgraciadamente arrastra y seguirá arrastrando como equipaje de esos años
sufridos.
Disculpen
Sres. por tener la osadía de denunciar varias veces a Fiscalía y al Juzgado a
tantos colegas e instituciones que ustedes tan “dignamente” defienden; tan dignamente que, en no pocas
ocasiones. parecen abogados del Diablo. Denuncias obligadas por las campañas de
acoso institucionalizado y chantajes zafios que yo y mi familia hemos y
seguimos siendo sometidos.
Disculpen
Sres. porque con mi osadíade intentar
ayudar a mi hija ha habido y hay gravísimos “efectos colaterales” hacia ella y
mi familia; tanto que en su momento se me denunció por supuesta desprotección
hacia mi hija.
Disculpen
Sres. por mi absurda visiónde ver tirada
a la basura la infancia y adolescencia de esta niña ya mujer.
Disculpen
Sres. por tantas y tantas noches sin dormir y por absurdamente verme obligado a dejar mi trabajo durante 3 eternos años, incluida las varias lesiones en la retina de mi ojo derecho por somatizaciones. En definitiva, paranoias de este que se disculpa como algún que otro avezado e inteligente colega suyos, sugirió.
Disculpen
Sres. por todo eso y muchísimo más
Disculpen
Sres., en definitiva, por ser lo que ustedes denominan un “PADRE “HELICÓPTERO”. Discúlpenme, de verdad.
Sin embargo, he de
decir en mi defensa que hay que ser ¡MUY HIJO/A PUTA! para hacer daño a cualquier persona; más aún
en este caso a una niña, sea ese gravísimo daño
por comisión u omisión y venga de
quien venga. Supongo que al menos coincidimos en eso, sindicalistas del Defensor
del profesor y Coordinadora.
He de aclararles que, por estos lares, la malsonante y vulgar expresión ¡HIJO
PUTA! no debe ser tomada
literalmente en cuenta, dado que entenderán que una madre no tiene culpa alguna
de que dé a luz a un futuro ¡HIJO PUTA! Sin embargo, como ustedes sabrán y entenderán, por referencias al
vástago, se califica a sí al MALNACIDO en cuestión. La madre,
evidentemente podría incluso ser una santa hembra. De todos es sabido que el HIJO PUTA no nace, se hace, se desarrolla, se reproduce e incluso, se muere.
Lo dicho, Defensores
del Profesorado Y Coordinadora nacional, Sra. Sequera : Hay que ser ¡MUY
HIJO/A PUTA!. Y ahí podemos entrar TODOS. Así que, aprovecho este momento y nomino
a todos aquellos HIJO/AS DE PUTAque por comisión u omisiónhan dañado muy gravemente no sólo a mi hija, sino a todas aquellas
víctimas de este consentido cáncer cínico y cobarde denominado acoso escolar.
Para aquellos HIJO/AS
DE PUTA que se sientan incómodos por el calificativo, considérense sencillamente
MALNACIDOS.
Desgraciadamente
puedo constatar y afirmar que conozco a demasiados.
Manuel Rodríguez González, supuesto padre
“helicóptero”,integrante sin duda alguna de esa fabricada estadística
de un tercio que parece ser, acosamos al profesorado. (Y sigo pensando: ¡CuantoHIJO
PUTA anda suelto!)
En honor
a mi hija y a las miles de víctimas que siguen sumándose vergonzosamente y,
especialmente, en memoria de Jokin Cebreros fallecido en 2004, tras tirarse de
la muralla de su localidad, Hondarribia, primer caso conocido y constatado de
acoso escolar en España, pero no el primero desgraciadamente; de Carla Díaz
Magniem fallecida en 2013, tras lanzarse a los acantilados en Gijón con sólo 14
años; de Sarai Mondragón, joven colombiana con 13 años; de Mónica Jaramillo de
15 años, de Arancha, chica de 16 años que se tiró desde un 6º piso en Usera; de
Diego un chico de 11 años que se tiró de un quinto piso, hace tres años; de
Alan de 17 años hace tres años; de
Lucía, joven murciana de 13 años que se quitó la vida hace un par de años, de
Unai con 12 años; de Zulima de 16 años que se quitó la vida hace escasamente
dos años; de Elisabeth en Navarra, joven
de 17 años; y los muchos que quedan, y me temo, se sumarán a estas cínicas y
míseras esquelas obligadas por inacción, negligencia, complacencia y cobardía
de quienes debieron protegerlas… todos/as ellos/as de una forma u otra
obligados/as a ir a un lugar donde lo de menos era el aprendizaje,
socialización y cooperación, como tan repetidamente se nos cuenta…
D.E.P.
Nota
última:
Quiero aclarar a lectores
y detractores que todo lo que en estos blogs comento es sencillamente producto
de mis suposiciones, de mi dura experiencia y de las muchas hostias que el
poderoso establishment reinante me ha infringido a lo largo de demasiados años;
tantos como los que lleva siendo "puteada" una joven de 20 años desde
su más tierna infancia. Por tanto, estas presunciones y suposiciones
interprétense como simples opiniones y reflexiones personales. Que cada
cual las entienda procedentes o no. Yo desde luego me las creo, aunque me reservo
esa supuesta “paranoia” con la que a algunos malnacidos les encantaría
etiquetarme. Quede ahí ese frágil "escudo anti hostias" por lo que pudiese pasar…
Resultan vergonzosas las
manifestaciones PRO PESCA DE VOTOS del actual mandatario regional
extremeño, Guillermo Fernández Vara, en la jornada regional de AMPAS “El
sistema educativo extremeño, acoso escolar y educación sexual desde la familia”,
organizado por FREAMPA-CP, el pasado sábado, 26 de octubre en Almendralejo. Entre otras perlas cultivadas, según se dice en el diario ACOSO ESCOLAR SISTEMA EDUCATIVO REGIÓN DIGITAL ,
Vara expresa que “los niños son lo
más importante que tenemos entre manos”, señalando entre otras cosas
que se está trabajando para mejorar cada día el sistema escolar, “especialmente
en lo concerniente a la diversidad y a la plena inclusión”. Como logro
fundamental subraya que “hace tiempo hablábamos de la educación para todos y
ahora hablamos de la educación para todos, pero en las mismas condiciones”.
Queda claro que el concepto tan mal interpretado y nada llevado a la praxis de
inclusión es usado inadecuadamente por este político de turno, que contempla la
denominada inclusión como igualdad de condiciones y poco más, cuando el
concepto de INCLUSIÓN en si recoge fundamentos tan esenciales como el
condicionamiento positivo (discriminación positiva) hacia el colectivo en
inferioridad de condiciones.
Y es que la INCLUSIÓN, Sr. Fernández Vara, nada
tiene que ver con la supuesta INTEGRACIÓN, esa que se realiza en la praxis cual
voluntariedad graciable, pero en modo alguno como deber inexcusable y
fundamental en pro de los derechos de grupos en inferioridad de oportunidades. Incluir, Sr. político de turno, no es colocar
ni dotar a los más desfavorecidos de supuestas mismas condiciones para que la
sociedad pueda tenerlos en cuenta. Incluir, sr. Fernández Vara, es dotar de las
herramientas necesarias para que determinadas inhabilidades o capacidades
puedan equilibrar esa balanza cínica y desajustada en todos los órdenes de la
vida. En definitiva, Sr. político de turno, es el Sistema educativo en este
caso quien debe adecuarse a las peculiaridades del individuo y no al revés,
como así viene sucediendo en este mediocre y trasnochado sistema educativo
nuestro, donde esas inhabilidades molestan; tanto que se presiona a este grupo
de alumnado para ser granjerizado (Consúltese el enlace INCLUSIÓN: ¿UTOPÍA? )
Continúa expresando el actual Presidente Autonómico
extremeño su preocupación por el consumo de tabaco y las nuevas fórmulas de
fumar en menores, así como el uso de apuestas deportivas en jóvenes y menores.
Sin embargo, llama la atención que, en el artículo en sí, no se hable en ningún
momento, del temible e incómodo cáncer socio-educativo del acoso escolar.
Desconozco si el tema apenas se tocó (ya que en modo alguno se referencia) o
simplemente se nombró expresando supuestamente la enorme preocupación y
prevención del mismo por parte del sistema educativo, dado que en dicha reunión
se supone entraría a debatirse esta dañina realidad en las aulas, como titula
dicha jornada: “El sistema educativo extremeño, acoso
escolar y eduación sexual desde la familia”.
“Los
niños son lo más importante que tenemos entre manos”decía el líder socialista extremeño en su
intervención. Al respecto, recordar a este “mirlo blanco” (consúltese el
enlace ODA AL MIRLO BLANCO ) que ya desde 2007 me dirigí a él y denuncié
hechos gravísimos, en este caso el de una niña que, con unos pocos años, ya se
hundía en un fango de mentiras, falsedades y falta de apoyo total en todos los
órdenes para finalmente caer en las redes de un cobarde y mísero caso de acoso
escolar sustentado por el sistema educativo y apoyado por demasiados tentáculos
de la Junta de Extremadura; hechos transmitidos además posteriormente varias
veces a este “político típico” en el 2010 e incluso el año pasado, 2018.
“Los niños son lo
más importante que tenemos entre manos”: Poco
importante, parece ser, ha sido mi hija para sus manos, Sr. Fernández Vara,
niña que contaba tan sólo 9 años cuando acudí por primera vez a usted; manos
nada limpias me temo, nada capaces de apoyar a una niña; manos manchadas -me
temo- de complicidad, inacción y dejadez; manos faltas de ética; manos cobardes
como la de tantos testigos mudos y complacientes que han sido incapaces de
aportar un apoyo necesario y de auxilio ante ese acoso y derribo, no ya sólo a
esa niña, sino incluso a toda su familia. Manos sucias, muy sucias, Sr.
Fernández Vara, tan sucias que a día de hoy esa niña a la que le robaron la
infancia y la adolescencia, ya cuenta con 21 años y unas secuelas psicológicas
y sociales perdurables de por vida. Manos tan sucias e intoxicadas. Sr.
Fernández Vara, como como las de los demasiados cobardes que por comisión u
omisión sustentan, disfrazan y polucionan este terrorismo institucionalizado
denominado acoso escolar, pero que el sacrosanto sistema educativo y demasiados
esbirros con sus enquistados síndromes de negación y de Diógenes institucional,
dicen, cuenta, no existe en los colegios. ¡Cosa de niños, siempre pasó!.
Todo
un Sistema Educativo incoherente y carnavalero, por aquello de disfrazar muy a
menudo con falsas caretas la denominada y a menudo inexistente Atención a la
Diversidad de la que tanto presumen pero escasamente verifican. Las supuestas
Necesidades Educativas Específicas que este grupo de alumnado necesitan,
brillan por su ausencia y Normas teóricamente garantistas, protectoras,
inclusivas e igualitarias como se proclaman en la rancia y agría tesis
educativa, se violan y coartan en la práctica, como casi sistemáticamente viene
ocurriendo, salvo honrosas excepciones.
¿Qué
decir del acoso escolar enquistado en las aulas y del que tanto se ningunea por
el sistema educativo con ese sistemático síndrome de negación y que se extiende
desde la generalidad de direcciones de centros hasta Inspección, verdaderos
conductores y ejecutores de que se intoxiquen, oculten y polucionen tantos y
tantos casos de este terrorismo socio-escolar, y quizás lo peor: con la
complicidad de políticos al uso que siendo alertados de demasiadas situaciones
inmorales e ilegales, apuestan por la cómoda y cínica posición de inacción, con
sus posaderas en la poltrona correspondiente, antes que ser proactivos y tomar
decisiones necesarias y comprometidas
frente a injustas situaciones de muy dudosa legalidad y a veces
prostituidos consentimientos por activa o pasiva, con la inacción y mirar a
otro lado, cuando no la callada por respuesta, amparándose en un cínico e
hipócrita silencio administrativo.
Finalmente, este “político típico”, muestra su nuevamente
presunta preocupación, por el gasto que muchas familias asumen en
relación a los colegios. Recordar al “mirlo blanco” que durante toda la etapa
escolar que mi hija deambuló, se le privó de ayuda en forma de becas o ayudas
por sus necesidades educativas específicas, a pesar de que se cumplía
escrupulosamente con todos y cada uno de los requisitos exigidos. Denegaciones
sistemáticas, me temo, en forma de vil vendetta por mis escritos de quejas y
denuncias. Denegaciones que -opino- podrían constituir incluso prevaricación y
muy graves negligencias de responsables relacionados con el entramado educativo,
más si cabe cuando por el acoso escolar e institucional sufrido me vi obligado
a coger una excedencia en mi trabajo durante tres dilatados años, por lo que
las sesiones de psicoterapia que de modo privado tenía mi hija tuvieron que
dejarse, dado que en esa época me endeudé considerablemente.
¿Preocupación Sr. Fernández Vara? Le invito a abrir una
comisión de investigación sobre el tema, como ya les animé a hacerlo en alguna
que otra ocasión.
Como
iniciaba este escrito, resultan
vergonzosas determinadas manifestaciones de políticos al uso en tiempos de
pesca, que con falsos escaparates de supuesta y virginal preocupación,
honestidad y lucha por el bienestar social no dudan en transmitir enormes campañas publicitarias orquestadas. Se
alabarán los logros conseguidos, las conquistas y derechos inherentes… sólo que
esas medallas quedarán en manos de unos pocos elegidos, mientras demasiados
afectados y familias implicadas seguiremos impotentes, incrédulos, ninguneados,
desasistidos y apenas auxiliadas por lo que publicitan bastantes políticos de dudosa
y escasa altura ética, con tal de que el próximo día 10 de noviembre - “el día
de la gran pesca” - sean muchos los que piquen en esos cebos enquistados de
mentiras y falsas promesas. ¡Así nos va! Como diría el maestro Serrat: ¡Disculpe Sr. Vara, disculpe el Señor!
Da lo mismo pedir auxilio a la denominada figura del
Defensor del Pueblo: Se haga con Múgica, Becerril o ahora con Fernández
Marugán…
Da lo mismo solicitar justicia a esa Fiscalía medrada no pocas veces de
compromiso y dignidad; acostumbrada, al menos en los casos que recurrí a ella,
a la inacción y a la fórmula cómoda, viciada y cínica de que el asunto se
archiva sin más explicación.
Da lo mismo pedir la denominada ”Justicia Gratuita” aunque
cumplas todos los requisitos porque además de ponerte mil y una trabas para
disfrutar de ese derecho, si finalmente accedes a él, se medrará, por activa o
pasiva pero se medrará ante posibles denuncias cuando son las instituciones públicas
las denunciadas.
Da lo mismo….
Me pregunto si acaso mi hija y yo no pertenecemos a ese
“Pueblo” que por unas razones u otras nos sentimos indefensos, ninguneados,
excluidos, bilipendiados, acosados, reprimidos, impotentes, marginados,
defenestrados y en definitiva parias ante ese coloso institucional, denominado
Estado. Estado que es usado con prevaricación y alevosia por esos “yuppies”
disfrazados de “Defensores de los ciudadanos” cuando denuncias muy graves actos
que coartan tus derechos y libertades de por vida. Se hacen llamar Defensores y
garantes de nosotros los ciudadanos, aunque de puertas para adentro nos traten
como vulgares individuos de ese “populacho” al que con sus promesas electorales
y demás supuestas prebendas sociales nos enredan en sus falsas redes
recubiertas de mentiras y promesas que se incumplirán, pasado el periodo de
pesca de votos. No se nos ocurra poner en entredicho la ética, transparencia, honestidad
y puesta en marcha de esos Títulos Constitucionales(consagrados dicen)
reconocidos por ese escaparate travestido de derechos, libertades y deberes de
nosotros, “vulgares españolitos”, a la que denominan “Constitución”; menos aún
cuando hay piezas claves comoel
amiguismo, intereses políticos, deudas de dudosa ética que se pagarán con
favores de difícil justificación ética, moral y deontológica; y en esencia, compadreo
de esa “clase superior” que a veces recuerda al feudalismo de hace tanto tiempo.
¿Defensores del Pueblo? ¿De qué pueblo me hablan? ¿A qué
parte de la sociedad de ese Pueblo defienden? ¿O acaso hay una autoamnistia no
escrita pero permitida para determinados colectivos cercanos a ustedes?
La corrupción se extiende como una grave mancha en nuestra
sociedad y ya no es esporádica, infrecuente, atípica o puntual. Esa inmoralidad
que es incapaz de asistir, defender y apoyar al ciudadano, porque sencillamente
medra ante ciertas instituciones y calla y otorga es ampliable y ya se ha hecho
extensiva a determinados pilares del constructo básico de esta nuestra
moldeable, enfermiza y prostituida Constitución nuestra. Es cínico, inverosímil
y vergonzoso que haya figuras como la referida, que se hace llamar “Defensor” para
conociendo denuncias de corruptelas, violaciones de derechos y libertades no
sólo lo consienten con su inacción y ninguneo, sino que incluso ya ni siquiera
tengan la decencia de contestar ante muy graves acusaciones… pero no hay
problema: si denuncias estas actitudes de política prostituida y artificial
tendrás por respuesta la callada o el cínico remedio anquilosado de que todas
las actuaciones son correctas y adecuadas. Sin explicaciones, sin objetividad,
sin información consecuente. No hay más. Fin del problema. Ese “patriciado”
habrá aniquilado las quejas de esa “plebe molesta”, de ese populacho engreido e
insoportable; perdón quise decir de ese “Pueblo” de esa ciudadanía a la que
dicen, se deben. Y yo chupándome el dedo L
El pasado 22 de marzo de 2014, publicaba en uno de mis blogs el caso de una
chica que se vio obligada a tomar la fatal decisión de suicidarse por el acoso
escolar que -me temo y opino-sufría (Consúltese BULLYING
UN CIELO LLENO DE ANGELITOS MUERTOS ).
4 años después, el pasado día 4 de abril de 2018, contestaba
a la pregunta que la hermana menor de esa chica
colombiana, Sarai Mondragón, me hacía, respecto a la información que tenía de
su suicidio obligado (Consúltese SUICIDIOS
INDUCIDOS POR ACOSO ESCOLAR. A LA FAMILIAR DE UNA VÍCTIMA )
Me resulta miserable que hace escasos días apareciese en los
Medios de ¿Información? que
“Un total de 14 centros españoles han sido reconocidos por su labor de
concienciación en acoso escolar y uso de redes sociales”
estando incluido
entre ellos, el colegio donde Sarai Mondragón, -opino- sufrió acoso escolar y por el
que se quitó la vida.
Resulta -desde mi óptica particular- como poco indecente, cínico y negligente el reconocimiento
a dicho colegio, teniendo en cuenta los graves hechos que entiendo en él se produjeron,
pero me temo que el poder omnipresente de determinados estamentos es tal que
esos gravísimos hechos se entierren y disfracen para que el olvido pase página
cual si no pasara nada. Es más, para incluso -opino y creo- se concedan distinciones, cara a
lavar una muy dudosa cara de dignidad y lucha contra el acoso escolar, y así
mostrar un inmaculado escaparate de compromiso ético con el alumnado. Todo ello,
indudablemente con el beneplácito de los burócratas y políticos que han apoyado
este reconocimiento a este supuesto “sacrosanto colegio”.
Sarai fue enterrada. No sólo se enterró su cadáver pueril,
sino además se enterró su dolor, se enterró su desesperación, e incluso se
enterró el recuerdo que parece ser, tras cuatro años de ocultamiento, silencio
y complicidad, muchos ayudaron a tapar, a esconder, a ocultar. Sarai fue enterrada para no ser visibilizada, para sencillamente no existir. Y es que, de todos es sabido, que cuando un gravísimo caso se oculta, se intoxica y se disfraza pasa en la práctica a no existir, a ser olvidado.
“Enhorabuena” colegio de Sarai por ese reconocimiento por su labor de
concienciación en acoso escolar.
“Enhorabuena” a la Secretaria de Estado, Ana Botella, y a
todos los súbditos del Ministerio del Interior que han elaborado el Plan
Director para la Convivencia y Mejora de la Seguridad Escolar por el “celo y
compromiso” del que parece ser, han hecho gala, reconociendo a ese colegio -me temo y así lo pienso-
manchado de sangre esa supuesta labor de concienciación en contra del acoso escolar, y por ende del maltrato y violencia escolar
No se preocupe usted, Sra. Botella, Delegada del Gobierno: A los niños y jóvenes no debe hacer falta
cuidarlos. Serán felices y descansarán eternamente en el cielo,
independientemente de su forma de alcanzar ese premio divino, aunque a ellos
les llegue su hora muy anticipadamente…
Eso venía a manifestar el AMPA del “Colegio reconocido”
"La alumna de
nuestro colegio nos acaba de dejar para reunirse con nuestro Señor, ya goza del
descanso y la felicidad eternas junto a la Virgen y a Madre Alberta. Desde hoy
contamos con un angelito más en el cielo. Sabemos que es un hasta pronto. Seguiremos
disfrutando deella
a través de la Comunión de los Santos, hasta que llegue nuestra hora y también
nos toque a nosotros el premio del descanso eterno".
Quiero aclarar a lectores y detractores que todo lo que en
estos blogs comento es sencillamente producto de mis suposiciones, de mi dura
experiencia y de las muchas hostias que el poderoso establishment reinante me
ha infringido a lo largo de demasiados años; tantos como los que lleva siendo
"puteada" una joven de 20 años desde su más tierna infancia. Por
tanto, estas presunciones y suposiciones interprétense como simples
opiniones y reflexiones personales. Que cada cual las entienda procedentes
o no. Yo desde luego me las creo, aunque me reservo esa supuesta “paranoia” con
la que a algunos malnacidos les encantaría etiquetarme. Quede ahí ese frágil
escudo antihostias por lo que pase…