Acoso escolar e institucional (Pincha en la imagen)

Acoso escolar e institucional (Pincha en la imagen)
ACOSO ESCOLAR E INSTITUCIONAL (Pincha en la imagen)

Traductores

English plantillas curriculums vitae French cartas de amistad German temas para windows Spain cartas de presentación Italian Dutch Russian Portuguese Japanese Korean Arabic Chinese Simplified

sábado, 13 de julio de 2013

Tributo a un hijo suicida víctima del bullying

 

contraelacosoescolar004El Nuevo Día, Puerto Rico

Un hombre estadounidense caminará 5 000 millas en dos años para denunciar el bullying y sanar la pérdida de su hijo de 15 años.

La pérdida de un hijo es un suceso de tan gran magnitud que ni siquiera existe un nombre para llamar a una persona cuyo vástago ha muerto.

Y así, con un inmenso dolor sumado a la voluntad de impulsar un cambio, Joe Bell comenzó su titánico plan este sábado: caminar 5 000 millas en dos años a través de EE.UU., según reportó el diario The Columbian.

El hijo de Joe, llamado Jadin, era abiertamente gay y se suicidó este año tras ser víctima de bullying en su escuela y vía internet. Joe y su hijo presuntamente denunciaron el acoso a un consejero de la escuela La Grande en Oregon poco antes de que Jadin se ahorcara en el patio de la institución el pasado 19 de enero. El jovencito murió dos semanas más tarde en el hospital.

Ahora, Joe – quien tiene dos rodillas artificiales y una cirugía mayor de la espalda – espera recorrer los estados de Texas, Arkansas, Luisiana, Pensilvania, Nueva York, Delaware, entre otros, a un ritmo de 15 a 25 millas por día para denunciar el crimen del acoso.

Según el diario La Grande Observer, Joe renunció a su empleo para hacer esta caminata y, además, confesó que hará el recorrido en memoria de Jadin, para llevar un mensaje contra el bullying y, finalmente, para sanar su dolor en el proceso.

En el transcurso, Joe Bell – quien además creó la fundación Faces for Changes- visitará diversas escuelas para enfatizar sobre la importancia de romper el silencio en los casos de acoso.

  • Reality check

De acuerdo con los reportes más recientes de la organización Bullying Statistics, 1 de cada 4 niños en escuela elemental o secundaria, son víctimas de acoso por motivo de su raza, género, discapacidad, religión, u orientación sexual.

Peor aún, los adolescentes homosexuales son tres veces más propensos a cometer suicidio que otros jóvenes de su misma edad. Además, los estudiantes que son parte de la comunidad LGBTT están cinco veces más inclinados a faltar a la escuela porque se sienten inseguros. Un 28% de estos jóvenes termina abandonando la escuela.

En Estados Unidos, el suicidio continúa siendo la principal causa de muerte entre adolescentes menores de 14 años. Y según las estadísticas del 2010, existe una fuerte conexión entre ser víctima del bullying y el suicidio.

Fuente:

http://www.elcomercio.com/

4 comentarios:

Mili dijo...

La pérdida de un hijo es irreparable, pienso que nunca sanas, sobre todo cuando fue consecuencia de un problema tan vil. Ánimo a este padre.

araceli dijo...

EN EL CASO DEL BULLYING ES IMPRESCINDIBLE QUE SE EMPIECE O SE FORTALEZCA EL EDUCAR EN VALORES SOLO ASI SE TOMARA CONCIENCIA DE LAS ACCIONES PROPIAS

Vagabundo dijo...

Mili, el dolor debe ser inmenso. La ira e impotencia debe ser total, cuando ni siquiera los que debían poner todo su celo y empeño por garantizar la seguridad física y psicológica de la víctima, ni siquiera asumen su actitud pasiva y desidiosa. Me uno, como tú, al dolor de este padre.

Vagabundo dijo...

Como comentaba en otra publicación, Araceli, estoy de acuerdo con lo que expresas, aunque temo que la falta de implicación y compromiso con la víctima es, si cabe, una actitud cómoda y bastante cobarde de nuestra sociedad actual. Este silencio cómplice alimenta el ego enfermizo de los hostigadores y hunde a la víctima. Si existiese verdadera empatía y solidaridad este terrorismo se minizaría radicalmente, pues la fuerza del acosador también sería mínima y la autoestima y fortaleza psicológica de la presa aumentaría, gracias a ese apoyo grupal que, desgraciadamente, muy a menudo no se verifica. Saludos cordiales.