Acoso escolar e institucional (Pincha en la imagen)

Acoso escolar e institucional (Pincha en la imagen)
ACOSO ESCOLAR E INSTITUCIONAL (Pincha en la imagen)

Traductores

English plantillas curriculums vitae French cartas de amistad German temas para windows Spain cartas de presentación Italian Dutch Russian Portuguese Japanese Korean Arabic Chinese Simplified

lunes, 23 de febrero de 2015

«Que el suicidio de mi hija sirva para que el bullying sea delito, no una simple falta»

 

madre CarlaCarlota Fominaya

Monserrat Magnien, madre de Carla, pide también que los profesores sepan detectar el acoso escolar

Fotografía: Mario Rojas

El dolor por la pérdida de su hija, que se suicidó tirándose por un acantilado al no poder soportar ser víctima del acoso de sus compañeros de clase, le hace arrastrar las palabras. Pero no le quita un ápice de claridad. «El acoso escolar debe ser reconocido como delito por la ley, y no se puede quedar en una simple falta». Su petición llega tras conocerse la pena impuesta a las dos únicas chicas imputables por el bullying que sufrió la niña, a su juicio, «irrisoria, dadas las circunstancias y el resultado de sus acciones: tareas psicosociales durante cinco meses. La tercera en discordia era menor de 14 años, pero si son menores para este tipo de acciones, son menores para todo».

Su segundo objetivo es que el suicidio de su hija sirva para que se obligue a «los profesores a estar capacitados y preparados para detectar estas cosas», y que «los centros escolares no miren para otro lado». «Hay una cosa clara —relata—, y es que en el caso de nuestra hija, lo sabían. Porque no fue un episodio ni dos. Ella se quejó al centro y no le hicieron caso. Cuando un profesor sabe perfectamente las dinámicas que se suceden en su clase, y si un pequeño no sale al recreo a jugar, o está triste y llora en el baño». La realidad es, piensa Magnien, que «unos se dan cuenta y otros no lo quieren ver. Es como si reconocer que un centro escolar tiene este tipo de problema le desprestigia. Cuando yo creo que es al revés, les daría más prestigio. Tú cuando eliges un colegio crees que tu hijo estará protegido, cuidado... dado que no es un número, sino una persona. No son cosas de niños».

Fuente:

http://www.abc.es/familia-padres-hijos/padres-hijos.asp

sábado, 21 de febrero de 2015

Plan Nacional para frenar el acoso escolar

 

Piden un Plan Nacional para frenar el acoso escolar

m. j. pérez-barco/Carlota fominaya

Las asociaciones denuncian que falta formación y concienciación sobre el bullying en los colegios, pues miran para otro lado cuando se detecta un caso

Piden un Plan Nacional para frenar el acoso escolar

Isabel Permuy

Uno de cada cuatro escolares de 8 a 18 años confiesa haber sufrido violencia y acoso escolar

No basta con los Planes de Convivencia de los centros escolares promovidos por la Consejería de Educación de cada comunidad autónoma, ni con haber diseñado a nivel regional protocolos de actuación contra el bullying (acoso escolar) y el ciberbullying para atajar este grave problema que se extiende por los colegios e institutos del país. Hay que ir más allá.Por eso, ya se alzan voces pidiendo que se ponga en marcha un Plan Nacional contra el Acoso y la Violencia Escolar, similar al Plan Nacional sobre Drogas o al Plan Integral contra la Violencia de Género.

El bullying se ha convertido en un verdadero peligro, cuyas secuelas tienen la misma magnitud que las drogas o que el monstruo de mil cabezas de la violencia machista. Y la gran mayoría de las veces pasa desapercibido, entre otros motivos porque muchos centros educativos todavía consideran que el acoso escolar «es cosas de niños», según explican diferentes asociaciones consultadas por ABC. «Hay colegios que han empezado a concienciarse y se han dado cuenta de que tienen un problema y quieren atajarlo. Pero la gran mayoría de los centros mira hacia otro lado, dicen que es cosa de niños y que no pasa nada. Conocemos profesores que incluso han querido frenar un caso de acoso y la dirección del centro no les ha dejado. Tenemos casos de madres que han enviado informes médicos de lesiones y el director ha dicho que la víctima exagera», sostiene María José Fernández, presidenta de la Asociación Madrileña contra el Acoso Escolar (Amacae).

Falta formación

¿Falta concienciación, formación, sensibilización... en la comunidad educativa? ¿Es que los colegios no quieren complicarse la vida? De todo un poco, como sostiene el presidente de la Asociación Nacional para la Prevención del Acoso Escolar, Enrique Pérez-Carrillo de la Cueva. «La formación brilla por su ausencia y falta concienciación», mantiene. «Los centros siempre dicen que tienen un protocolo bueno y que lo aplican, sin embargo los colegios cuando investigan si es un caso de acoso lo hacen como les da la gana. Muchos centros privados y concertados obvian el problema y los públicos cuando investigan justifican lo que ocurre en favor del cole. Por eso, es necesario un Plan Nacional para combatirlo».

Los planes de actuación autonómicos que indican la mejor manera de proceder en estos casos «son más bien una guía —considera la Asociación PostBullying—. Un Plan Nacional va más allá, con estudios, estadísticas, guías específicas de actuación y actualizaciones informativas que beneficiarían a la infancia».

Uno de cada cuatro niños es víctima de violencia y acoso escolar

Desde luego, en las aulas españolas el bullying es una realidad, aunque haya quien mire para otro lado, como demostró la investigación más exhaustiva que se ha realizado en España sobre este asunto y a la que todos los expertos remiten. Se trata del estudio Cisneros X «Violencia y Acoso escolar» de 2006, que encuestó a 24.990 alumnos entre 8 y 18 años, y reveló que uno de cada cuatro niños es víctima de violencia y acoso escolar.

«Pero hay centros que siguen restando importancia al bullying, otros en los que un profesor ha tenido que luchar contra su equipo directivo para intervenir en un caso de acoso, centros donde parecen muy receptivos de palabra y en la práctica silencian situaciones muy preocupantes. Falta formación y sensibilización. La mayoría de los casos de bullying empiezan en Infantil y se prolongan hasta Secundaria, por lo que un Plan Nacional no es suficiente. Esto es un delito, que si se comete con menos de 14 años queda impune. Hace falta una legislación que proteja a la víctima frente al agresor, aunque éste sea menor de 14 años», denuncia la Asociación Postbullying.

La familia y el profesorado

Las familias tampoco se quedan atrás en su trozo de pastel de culpa. «Muchas no colaboran», corrobora Rosario del Rey, responsable del proyecto europeo School Safety Net y del proyecto I+D de Excelencia «Sexting, ciberbullying y riesgos emergentes en la Red: claves para su comprensión y respuesta educativa». Para ella, muchas son las que de forma casi automática cambian de centro a la víctima, en un intento vano de romper el vínculo. «Vano, porque además, ahí están las redes sociales para seguir haciendo daño», apunta Del Rey.

La realidad, continua esta experta, es que para llegar a este punto han debido fallar muchas cosas antes. Y en todo caso, recalca, «el que debería cambiar de colegio es el agresor. Pero cuando se le dice a los padres que colaboren con el colegio, se sienten culpables, y piensan que les estás llamando malos padres. Siempre tienden a proteger a su hijo, porque lo sienten como una manifestación de su proyecto vital».

Defensa de los acosadores

Esto también lo ha comprobado el profesor de Educación Física y coordinador de Convivencia y Disciplina del Colegio Buen Consejo (Madrid) Carlos Hidalgo, para quien uno de los mayores problemas del bullying es la defensa a ultranza que hacen los padres de los hijos acosadores, actuando siempre a la defensiva, y el poco control que ejercen en casa de lo que hacen los niños en las redes, a lo que él añade una sensación de cierta impunidad que tienen menores de 14 años. Pero los colegios, concluye, «estamos muy preocupados por este asunto, que es más habitual de lo que se piensa y muy complicado de identificar. Nuestro objetivo es trabajar por la identificación y también por la prevención y la mediación».

Padres y profesores pueden ser sancionados

El bullying es una muy falta grave en los protocolos de actuación contra el acoso escolar de la comunidades autónomas. Conlleva una sanción de varios de expulsión del colegio. Como tal el acoso escolar no está tipificado en la ley, pero sí acciones como las amenazas, calumnias, injurias, lesiones... Si el niño que lo comete es menor de 14 años no tiene responsabilidad penal y no puede ser juzgado. Sin embargo, sí responden civilmente los padres y tutores del colegio que pueden ser sancionados económicamente por los daños y perjuicios causados. Entre 14 y 15 años los chicos tienen responsabilidad penal atenuada (cumplen la pena en un grado inferior). Y entre 16 y 17 años son responsables penalmente, según la Ley del Menor: pueden ser internados en centros de menores, o se les prohíbe ir a ciertos lugares, o incluso estar en libertad vigilada.

Fuente:

http://www.abc.es/familia-educacion/educacion.asp